Nuestro huerto tiene ya su propio jardín de flores: entre verduras, hortalizas y árboles frutales, damos sitio a un espacio de meditación para la realización de actividades relacionadas con la salud emocional y que se complementa con el huerto ecológico para trabajar la alimentación saludable y la importancia de un trabajo bien hecho que acaba dando sus frutos.
Este proyecto forma parte de un todo: en el mural que lo enmarca, las mujeres están regando las flores, que simbolizan la clama, el autocontrol, la dignidad (con el color púrpura y violeta que, además, es el color elegido por los movimientos feministas que luchan contra la violencia de género) y la pureza, la infancia, la limpieza, la estabilidad y la armonía (con el color blanco)
Y por si esto no fuera poco, nuestro patio de recreo cada vez está más lindo. ¡Da gusto pasear por este entorno tan florido! Esperamos también, que los alumnos contribuyan cada vez más a mantener este espacio limpio para seguir disfrutando de unas vistas y unos olores maravillosos.
¡Gracias a todos los jardineros!
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| Con Pilar, nuestra profesora de Biología. |
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| Con Marián, nuestra profesora de Compensatoria |
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