Gracias sinceras por vuestra aportación, vuestra dedicación, vuestro cariño... Nos encanta que nos visitéis.
Lamentablemente, el espectáculo que ofrecía el patio al finalizar el recreo era bastante triste, pues los alumnos olvidan la existencia de las papeleras y en un día como hoy, con tantas actividades en convivencia y productos que nos endulzan el alma... acabamos con un sabor amargo al ver que nuestro patio está cubierto de envases de zumo... Es lamentable.